SKYLINER III
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Los sillones de masaje también son conocidos como sillones relax. Se trata de sillones muy ergonómicos y muy cómodos que cuentan con un respaldo que es reclina hacia atrás y un faldón que se despliega hacia delante.
La zona de los reposabrazos también es muy cómoda y, por supuesto, cuentan con un sistema de vibraciones y movimientos que proporcionan a los usuarios masajes relajantes que les libera del estrés del día a día y les ayuda a que la musculatura y las articulaciones se liberen de las consecuencias de las malas posturas, de horas de pie o de horas sentados.
El funcionamiento de los sillones de masajes es realmente sencillo. Es importante saber que vas a disfrutar de un buen masaje relajante con la inclinación que desees simplemente pulsando un botón del mando a distancia del que disponen.
Estos sillones relax incorporan diferentes opciones de niveles de descanso muy atractivas. Son capaces de proporcionarnos una gran diversidad de masajes, unos más intensos que otros, pudiendo mantener las piernas levantadas para favorecer la circulación de la parte inferior del cuerpo.
Estos sillones de masajes son capaces de proporcionar importantes beneficios para nuestra salud de forma general, tanto física como mental.
La duración del uso de un masajeador dependerá de la zona que se tenga que tratar y de las necesidades del cuerpo.
Cuando el dolor, la tensión o las contracturas sean leves, es recomendable fijar una temperatura agradable que esté entre los 34 y 36 grados, una temperatura que ayudará a la descontractura pero que no va a quemar la piel, aunque también dependerá de la sensibilidad de cada piel.
Lo recomendable es no sobrepasar los 20 minutos de aplicación. Si lo que se quiere tratar es la zona cervical, se recomiendan sesiones de no más de 15 minutos.
La frecuencia de los masajes puede ser diaria.
El inventor de este magnífico compañero de relax fue Fujimoto Nobuo, un japonés que trabajaba como vendedor de tawashi. La idea surgió de una visita a unos clientes. Estos recibían masajes de profesionales con una magnífica cara de felicidad sentados en los sillones de su trabajo.
Comenzó reuniendo partes sacadas de la basura como cadena de bicicleta, volante de automóvil, pelota de beisbol, etc.
Se embarcó en un proceso de ensayo y error donde, en un principio la bola de masaje era una pelota de beisbol. Con una manivela colocada debajo del brazo se podía ajustar la posición.
La principal función de los sillones relax es la de proporcionar descanso a la persona que los usan y conseguir que se relajen. Por este motivo los sillones relax incluyen reposapiés, un respaldo reclinable y un diseño muy ergonómico, además de incluir un mecanismo relax.
Algunos sillones incluyen opciones adicionales como son los masajes, mecanismos levanta personas o la opción de poder adoptar la posición de gravedad cero.
También incluyen la posibilidad de poder cambiar la inclinación de la espalda y la de acomodar las piernas en posición horizontal. También se puede modificar la posición del asiento.
Cuando estamos estresados los músculos son el lugar donde más se acumula el estrés. La tensión muscular causada por este motivo suele manifestare como dolores de cabeza, dolores de espalda, de hombros y otros dolores corporales.
De hecho, la mayor tensión después de un día normal de trabajo se acumula de forma más generalizada en los hombros y en los músculos del cuello. Si el trabajo que se realiza requiere de mucho tiempo de pie, la tensión muscular se acumulará, sobre todo, en la zona lumbar y en las extremidades inferiores.
Ante el estrés, el cuerpo libera hormonas y estas hacen que los músculos se tensionen y aumenten su pulso.
Ante situaciones de estrés, hay músculos y órganos del cuerpo que se resisten. Los ojos son los primeros órganos donde se suele notar los síntomas del estrés.
El aparato digestivo y el estómago también se suelen resentir por estos casos de estrés y de ansiedad.
El hígado puede desencadenar alguna enfermedad relacionada con el estrés.
Otro órgano en el que se suele apreciar más los síntomas del estrés es la piel y se manifiesta mediante irritaciones, escamaciones o con picores.
Pero el órgano que sufre de una forma más importante los efectos del estrés es el cerebro. Cuando esto ocurre el cerebro genera un exceso de cortisol que afecta a la memoria y a la atención.
Lo que debemos saber antes de comprarlos, es cómo funcionan los masajeadores de espalda.
Suelen imitar el movimiento de las manos y emiten unas vibraciones que pueden ser de mayor o de menor intensidad con el objetivo de liberar tensiones de la zona de la espalda relajando la musculatura después de unos minutos de uso.
Los sillones de masaje son ideales para cumplir esta función ya que permiten a los usuarios adoptar posiciones cómodas y relajadas mientras reciben los movimientos de los componentes destinados a este uso.
Es importante destacar que los masajeadores de espalda no sustituyen en ningún caso el masaje de un buen fisioterapeuta, pero si que ayudan a aliviar en cierto grado la intensidad del malestar.
Siempre se han conocido los sillones de terapia como divanes y estos han estado vinculados a consultas de psicología o de psiquiatría. Sin embargo, podemos encontrar otro tipo de sillones de terapia que nada tienen que ver con estas profesiones pero que si ofrecen soluciones y tranquilidad a sus propietarios.
Hablamos de los sillones relax. Estos sillones también nos ofrecen terapia de relax, nos ayudan a conseguir liberarnos del estrés del día a día y a llevar a nuestro cuerpo a unos niveles de bienestar que nos preparen para hacer frente a las exigencias de cada nuevo día.
La sensación de bienestar que sentimos cuando recibimos un masaje nos gusta a todos, pero también nos aporta grandes beneficios, sobre todo a nuestra salud.
Estos son los beneficios que vamos a conseguir con un masajeador:
Nos hace liberar endorfinas que van a actuar sobre nuestro cerebro produciéndonos felicidad.
Nos libera del estrés y del dolor.
Activa nuestro metabolismo y la circulación del cuerpo.
Facilita el acceso al sueño y que este sea bueno y relajante.
Ayuda con el síndrome premenstrual.
La elasticidad de la piel mejora gracias a la activación de la circulación.
Ayuda con la disminución de la ansiedad.
Relaja los músculos y ayuda a su descontractura.
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